domingo, 24 de mayo de 2015

Graffiti. Trabajo del Año 2 A


A finales de los sesenta los adolescentes en la ciudad de Nueva York empezaron a escribir sus nombres en las paredes de sus barrios, aunque en realidad utilizaban pseudónimos, creandose así una identidad propia en la calle. Estos chicos escribían para sus amigos o incluso para sus enemigos. Quizás el ejemplo más significativo y a la vez el más conocido por todos sea el de Taki 183, un chico de origen griego que a la edad de 17 años comenzó a poner su apodo. Su verdadero nombre era Demetrius (de ahí el diminutivo “Taki”) y 183 era la calle donde vivía (poner el nombre de la calle fue un elemento usado por muchos más escritores). Taki trabajaba como mensajero y viajaba constantemente en el metro de un lado a otro de la ciudad. En el trayecto estampaba su tag (firma) en todos los lados, dentro y fuera del vagón. El no lo consideraba como algo malo, de hecho respondía así a las preguntas que le formularon en una entrevista en el New York Times: “Simplemente es algo que tengo que hacer. Trabajo, pago mis impuestos y no hago daño a nadie”. Estos actos le convirtieron en un héroe y poco después cientos de jóvenes empezaron a imitarle.


Algunos de los escritores también destacados de aquella época fueron: Frank 207, Chew 127, Julio 204, Bárbara 62... En principio no buscaban estilo, sólo querían aparecer por todos los lados. Es a partir de aquí cuando surgió el boom y cientos de adolescentes comenzaron a poner su nombre por toda la ciudad, haciéndose necesaria la creación de un estilo, tanto en la caligrafía, como en los métodos de ejecución o incluso los lugares utilizados para dicho fin. Por ejemplo, Soul 1, un escritor de la zona de Manhattan, se dedicó a escribir su nombre a media altura en los laterales de los edificios. Tracy 168 citaba: “Eran inalcanzables para el resto de los humanos. Parecía que podía volar”. También podríamos destacar la anécdota de Bama, cuyo deseo por superar a los demás en cuanto a emplazamiento de sus pintadas le llevó a intentar escribir su nombre en lo alto de una montaña situada en el norte del estado de Nueva York. Cual sería su sorpresa cuando al apartar los ramajes y limpiar la superficie vió que se le habían adelantado: “¡Mierda!”. Se lamentaba el muchacho. Un caso muy sonado fue el de Seen al pintar su nombre en letras gigantescas en el mismísimo letrero de la colina de Hollywood.
w.elarcondeclio.com.ar

sábado, 9 de mayo de 2015

Negro y Blanco. Henri Matisse


 Profesora: Carolina Vega.

Año: Tercero A


 Los trabajos Blanco y Negro Tema: Color. Blanco y negro con acento de color, Curso: 3 A. A partir de imágenes del pintor Henry Matisse colocar dos personajes en una situación aplicando blanco,negro y acento de color.


Pintor francés, máximo representante del fauvismo. El 20 de marzo de 1906 se inauguraba en los grandes invernaderos de Cours-la-Reine, en París, una nueva edición del Salón de la Sociedad de Artistas Independientes. Aquella exposición supuso el primer gran éxito de Matisse y su consagración como pintor y como cabeza visible de un nuevo movimiento.


Los lienzos del artista causaron sensación: de gesto espontáneo y color puro, su obra daba las pautas de un estilo nuevo, lleno de vigor expresivo y que se negaba a ser una mera imitación de la naturaleza. Destacaba entre sus pinturas la ensoñación simbolista Lujo, calma y voluptuosidad, cuadro adquirido por el también pintor francés Paul Signac, y cuyas gruesas y cortas pinceladas de intenso color recuerdan precisamente la técnica divisionista propia del mismo Signac; la tela estaba inspirada en los cuadros del que había sido uno de los maestros de Matisse, Gustave Moreau.

 Aunque Matisse sea conocido fundamentalmente como pintor, fue también un excelente escultor y dibujante. A lo largo de su dilatada carrera recibió las influencias de las sucesivas corrientes (Neoclasicismo, Realismo, Impresionismo y Neoimpresionismo), que supo transformar en un lenguaje moderno. Los maestros a los que más estudió fueron Poussin, Chardin, Watteau, Courbet, Manet y Cézanne. Su posición histórica como iniciador del Fauvismo no debe oscurecer sus logros personales al margen de un movimiento que, en realidad, duró poco y no tuvo programa. Su rival en magnitud e influencia fue Picasso, con quien mantuvo una distanciada relación de amistad y respeto durante muchos años. Los temas principales de su pintura fueron la naturaleza muerta, el paisaje, el desnudo femenino y su propio entorno (el estudio).

Las comunicaciones que aquí se muestran son un servicio más, esta comunicaciones se dan primero en el aula y cuaderno de comunicaciones, por lo tanto no las invalida. www.elarcondeclio.com.ar